Cabaña familiar cerca de la cima del Makalaus

Esta experiencia en un refugio de montaña os ofrece mágicas mañanas en la montaña y noches de invierno bajo la aurora boreal. La cabaña está construida con materiales reutilizados del antiguo refugio, y sus grandes ventanas permiten que la naturaleza entre en la sala de estar. Hay espacio para grandes y pequeños, y los niños pueden jugar solos en el altillo.

La primera planta tiene calefacción por suelo radiante, pero se puede encender la chimenea para crear un ambiente aún más acogedor. El altillo es perfecto para los niños: aquí pueden dormir y jugar juntos cuatro niños, separados del resto de la cabaña por una puerta. La mesa de la cocina se convierte en el punto de encuentro natural para las comidas y los juegos de mesa, mientras que la chimenea crea veladas acogedoras.

Alrededor de la cabaña hay varias terrazas donde se pueden asar salchichas, preparar café o simplemente disfrutar de las vistas. En verano, los niños pueden recoger agua del arroyo y explorar la naturaleza, mientras que en invierno hay posibilidades de practicar trineo y construir cuevas de nieve. El cielo estrellado es espectacular aquí, sin luces que lo perturben.

Justo debajo hay un lago para bañarse y pescar, incluso pescar en el hielo en invierno. La excursión a Makalaus, a 1099 metros sobre el nivel del mar, dura una hora y media y es apta para todas las edades. Desde aquí se puede ver Jotunheimen. La pista de esquí de fondo comienza sobre la cabaña y la estación de esquí de Stavadalen está muy cerca. La ciudad de Aurdal cuenta con panadería, tienda de comestibles y restaurante.